¿Para qué valdría la pasión (acharnement) de saber, si sólo asegurara la adquisición de conocimientos y no de alguna manera –y tanto como se pueda– el extravío de aquel que conoce? Hay momentos en la vida en que el problema de saber si uno puede pensar de manera distinta a como piensa y percibir de otra manera que como ve es indispensable para continuar mirando o re-flexionado. (...) Pero, ¿qué es la filosofía en la actualidad –quiero decir la actividad filosófica– si no es un trabajo crítico del pensamiento sobre sí mismo, y si no consiste, en lugar de legitimar lo que ya se sabe, en emprender la tarea de saber cómo y hasta dónde sería posible pensar de otra manera?”

El uso de los placeres.
Michel Foucault.

martes, 17 de diciembre de 2019

He soñado en un sueño.

 

He soñado en un sueño y veía una ciudad invencible bajo

los ataques de todo el resto de la tierra. 


He soñado que ésta era la nueva ciudad de los amigos,

nada era allí tan grande como la virtud del sólido amor,

que primaba sobre el resto.


Esto se comprobaba a cada hora en los actos de los hombres

de aquella ciudad,

y en todas sus miradas y palabras.

 

                                    En Hojas de hierba, de Walt Whitman.

 

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